¿Aumentó tu recibo de gas? Evita estas prácticas y ahorra más

Si sientes que tu recibo de gas está aumentando sin razón, necesitas conocer y evitar estos hábitos comunes que te hacen gastar de más. 

El gas es uno de los servicios más indispensables en el hogar, ya que lo usamos para cocinar, bañarnos y mucho más. Es por eso que debemos ser más conscientes de cuánto consumimos en cada actividad para hacer un uso más eficiente.

Aunque es normal que el consumo en casa tenga ligeras variaciones, si notaste un aumento reciente en el precio del gas, es posible que exista una fuga o que estés realizando algunas prácticas erróneas que elevan el costo de tu recibo mensual.

Para evitarlo, te presentamos algunas recomendaciones para usar bien este recurso y de paso, ahorrarle unos pesos a tu bolsillo.

Errores que gastan más gas en casa

Estas prácticas son muy comunes, sin embargo, pueden ser la causa del aumento de tu servicio de gas.

• Dejar el boiler encendido sin usarlo: Incluso en modo “piloto”, puedes gastar unos litros al día. 
• Usar ollas y sartenes muy grandes al cocinar: Retrasan la cocción de alimentos, prolongando el tiempo de uso en la estufa. 
• Cocinar sin tapas: Deja escapar el calor necesario para cocinar más rápido.
• Tomar duchas largas: En especial baños con agua muy caliente. 
• No detectar fugas: Es peligroso para tu salud y cartera, ya que desperdicia el gas y lo deja expuesto. 
• No dar mantenimiento: Especialmente a boilers, radiadores y tanques de gas.

A menudo, estas pequeñas acciones no generan un gran impacto en el consumo, pero al acumularse y ser muy frecuentes día a día, pueden incrementar considerablemente tu recibo de gas a fin de mes.

Recomendaciones para ahorrar gas

Adoptar estos pequeños cambios puede reducir tu consumo considerablemente y, por ende, el precio en tu recibo.

• Toma baños cortos: Pon el agua a temperatura tibia y cierra la llave de la regadera mientras te enjabonas. 
• Cocina eficientemente: Usa trastes de tamaño adecuado, tapa y deja a flama media para cocer uniformemente. 
• Si usas el horno: Opta por cocinar más de una cosa a la vez, así aprovecharás el calor de la mejor manera. 
• Da mantenimiento constante: Si consideras que tu boiler o tanque ya no tienen vida útil, cámbialos lo más pronto posible. 
• Revisa y repara: Si sospechas de una fuga de gas, aplica un poco de jabón para encontrarla y repararla cuanto antes. 

¡Cuida tu bolsillo y tu seguridad!

Recordemos que un mal uso del servicio de gas, además de aumentar su costo, también puede presentar un riesgo para tu familia. Una fuga no detectada y atendida puede ser peligrosa para todos. Es por eso que mantener y realizar revisiones periódicas, junto a estos hábitos más responsables es la mejor inversión para tu hogar.

Implementa estos cambios en la rutina diaria de tu hogar para disminuir tu recibo de gas de forma fácil y eficaz. Además, estarás cuidando tu salud, tu economía y al mismo tiempo, contribuyendo al uso responsable de los recursos.

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